4 de JUNIO de 2021

Cómo la terapia PEMF de BEMER puede mejorar la salud de las mujeres

Una mirada a cómo tan solo dos sesiones de ocho minutos de terapia BEMER al día pueden mejorar la salud y bienestar de las mujeres

Aunque muchos problemas de salud son iguales en hombres y mujeres, algunos de ellos afectan a las mujeres de forma distinta a los hombres.

Las enfermedades que afectan a la salud cardíaca, mental y ósea ocurren en mujeres con mayor frecuencia o les afectan de un modo diferente.

Por supuesto, no podemos controlar nuestra predisposición genética a tales desafíos para la salud, pero podemos gestionar los factores de riesgo relacionados para hacer elecciones que fomenten un estilo de vida saludable.

Siga leyendo para examinar los riesgos especiales para la salud que afectan a las mujeres durante toda su vida, y cómo la terapia BEMER diaria puede ayudar a mejorar su salud y bienestar.

Riesgos para la salud en mujeres

Salud cardíaca

Los problemas del corazón son causados normalmente por la acumulación de plaquetas en las arterias que bombean sangre en el corazón, también llamadas arterias coronarias.

En 2017, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) estadounidenses señalaron que, en Estados Unidos, la causa de muerte más frecuente en mujeres era la enfermedad cardiovascular. De hecho, una de cada cuatro mujeres en EE.UU. muere de una enfermedad cardiovascular.

Y si miramos a los datos, lo mismo puede decirse de los hombres. Pero resulta que los problemas del corazón afectan a las mujeres de un modo muy distinto.

Además, es sabido que las mujeres tras la menopausia tienen un mayor riesgo de padecer una mala salud cardíaca.

Otro factor que aumenta el riesgo de una salud cardiovascular deficiente es la falta de sueño. Las mujeres (y los hombres) con problemas crónicos de insomnio tienen un mayor riesgo de daños al corazón.1

Salud mental

Las mujeres también tienen más probabilidad de tener problemas con su bienestar emocional que los hombres. Casi el doble de probabilidad, según la Clínica Mayo.

Una parte de esta disparidad puede atribuirse a cambios hormonales derivados del síndrome premenstrual, el embarazo y el parto, y a los periodos previo y posterior a la menopausia.

Pero las experiencias vitales, los factores genéticos y otras influencias biológicas también ejercen un efecto decisivo.

Salud ósea

La salud de los huesos es fundamental para la salud general y la calidad de vida. Varios problemas pueden afectar a la salud y al bienestar de la mujer.

El deterioro del hueso y el cartílago en las articulaciones a veces genera dolor y molestias en manos, caderas, rodillas, espalda y cuello.

Además, pueden darse problemas de salud adicionales si el cuerpo no es capaz de producir nuevo tejido óseo para sustituir al antiguo. Si esto no se soluciona, el tejido óseo puede llegar a debilitarse tanto que podrá romperse con más facilidad de la acostumbrada.

Con respecto a por qué los problemas de salud ósea son más comunes en mujeres, la comunidad científica sugiere que existen varios motivos distintos que engloban el peso, la anatomía, las hormonas y las lesiones relacionadas con la práctica deportiva.

Como es lógico, cuanto más débiles son los huesos, más fácilmente pueden romperse.

Qué se puede hacer

Cada uno de estos problemas, y enfermedades tales como cáncer, ictus y enfermedades crónicas de las vías respiratorias inferiores, están en la parte alta de la lista de las preocupaciones de salud en la mujer.

Pero la Clínica Mayo subraya el hecho de que las amenazas más serias para la salud de la mujer pueden controlarse e incluso prevenirse con mindfulness y hábitos de vida saludables.

Esto es lo que recomienda para mantener un buen estado de salud:

• Aléjese del tabaco – Esto es muy fácil decirlo, pero si fuma o consume tabaco, no dude en decirle a su médico que le ayude a dejarlo. Y aléjese también del ‘humo de segunda mano’ siempre que pueda.
• Una nutrición saludable es fundamental – Cuantos más colores tenga su plato, ¡mucho mejor! Elija verduras, frutas, cereales integrales, alimentos ricos en fibra y fuentes de proteínas saludables como el pescado. Limite el consumo de alimentos ricos en grasas trans y saturadas y de aquellos con azúcar y sodio añadido.
• Mantenga un peso saludable – La pérdida de kilos excesivos —sin volver a recuperarlos— puede reducir el riesgo de padecer enfermedad cardiovascular y distintos tipos de cáncer.
• Póngase en movimiento – El ejercicio regular es uno de los mejores modos de mantener un peso y un estilo de vida saludables. Puede ayudar con la ansiedad y la depresión, reducir el riesgo de ictus y enfermedad cardiovascular y reducir asimismo el riesgo de determinados tipos de cáncer. No obstante, al elegir un tipo de ejercicio, asegúrese de que sea algo que realmente le guste. Ya sea natación, ciclismo o simplemente disfrutar de una caminata rápida. Cuanto más se mueva, más se reducirá el riesgo.
• Controle su consumo de alcohol – Si bebe alcohol, hágalo con moderación. En mujeres, eso significa una copa al día como máximo. El riesgo de distintos tipos de cáncer —incluyendo el cáncer de mama y el cáncer de hígado— parece aumentar con la cantidad de alcohol que ingerimos y el tiempo que hemos estado bebiendo con regularidad. El exceso de alcohol también puede aumentar la presión arterial y aumentar el riesgo de sufrir un ataque al corazón o un ictus.
• Controle el estrés – Otra recomendación que es mucho más fácil decirla que llevarla a cabo. Si se siente constantemente abrumada o irritable, su cuerpo y su función inmunológica pueden sufrir. Intente reducir el estrés siempre que pueda y aprenda maneras saludables de controlarlo.

BEMER y la salud de la mujer

Aunque la terapia BEMER no ha sido concebida para prevenir, tratar o curar ninguna enfermedad, puede tener un grandísimo efecto en la salud y bienestar de las mujeres.

Los dispositivos BEMER envían un campo electromagnético pulsado (PEMF) de baja intensidad al cuerpo con el fin de estimular de forma segura los músculos sanos, lo cual mejora temporalmente el riego sanguíneo local y fomenta una larga lista de beneficios para la salud.

BEMER no puede ayudarle a comer bien, evitar el tabaco o limitar el consumo de alcohol, pero puede aliviar el estrés, ayudarle a rendir y a recuperarse mejor, mejorar su fuerza muscular y potenciar su vitalidad y bienestar.*

¿Y lo mejor?

Todo esto es posible en tan solo dos cortas sesiones de ocho minutos de terapia BEMER al día.

Túmbese en el sofá de su casa y trate su zona lumbar con el aplicador B.Pad, o coloque el aplicador B.Sit en el asiento de la silla y complete una sesión de terapia BEMER mientras trabaja en la oficina.

Sea cual sea su estilo de vida, la línea de productos de última tecnología de BEMER se adaptará a él a las mil maravillas. Contacte hoy con su distribuidor BEMER local para más información.