¿Está buscando una afición saludable? A continuación, presentamos siete posibles beneficios del ciclismo para el cuerpo y la mente.

Los seres humanos necesitan hacer ejercicio regularmente y pasar tiempo al aire libre para sentirse bien.

El ciclismo combina estos dos pilares básicos de la salud en una misma actividad, con lo que abre todo un mundo de oportunidades…

No solo para mejorar el bienestar, sino también para disfrutar del paisaje, salir de aventura e interactuar con la naturaleza.

Si está usted buscando una nueva manera de mantenerse activo, la siguiente lista de siete beneficios para la salud le dará razones de peso para montarse cuanto antes en una bicicleta y comenzar a pedalear hacia una nueva vida más sana.

1. EL CICLISMO MEJORA LA SALUD Y LA FORTALEZA CARDIOVASCULAR

El ciclismo es un ejercicio de resistencia cardiovascular que mejora el riego sanguíneo hacia el corazón y los vasos periféricos, eleva la frecuencia cardiaca y aumenta el suministro de oxígeno.

Si se practica regularmente, con el tiempo el corazón se adapta a esta actividad. El resultado es que bombea la sangre con mayor eficiencia por todo el cuerpo, y abastece mejor a los músculos con los recursos que necesitan para rendir.

Un estudio sistemático realizado en 2011 sobre los beneficios que tiene el ciclismo para la salud reportó mejoras en la fortaleza cardiovascular y una disminución de los riesgos de sufrir afecciones cardiovasculares, sacando la conclusión de que es un excelente ejercicio para mantener en forma el corazón.

2. EL CICLISMO AYUDA A CONTROLAR EL PESO Y EL ÍNDICE DE GRASA CORPORAL

Al igual que otras modalidades de ejercicio cardiovascular, el ciclismo es un método fantástico para quemar calorías. Combinado con una alimentación adecuada, puede ayudar a gestionar el peso de forma saludable y a perder grasa.

Un estudio reciente de la revista International Journal of Obesity llegó a la conclusión de que desplazarse en bicicleta al trabajo ayudaba a los participantes a perder casi cinco kilos de grasa a lo largo de seis meses.

3. EL CICLISMO FAVORECE EL EQUILIBRIO Y LA ESTABILIDAD

Aunque mover las piernas para pedalear más rápido es la actividad que más energía gasta, permanecer quieto en la bicicleta también requiere un esfuerzo destacable.

Es posible que esto pase desapercibido para muchas personas, ya que es algo que un ciclista experimentado ni siquiera percibe, pero lo cierto es que mientras monta en bicicleta está todo el tiempo realizando pequeños ajustes para mantener la bicicleta derecha y seguir por la dirección adecuada.

Agarrar el manillar, rectificar la postura corporal y guardar el equilibrio sobre la bicicleta ejercita los principales músculos estabilizadores que hay en todo el cuerpo.

El resultado es un mejor equilibrio y una mayor estabilidad incluso cuando no se monta en bicicleta, y esto es un beneficio sustancial para las personas mayores, como demostró un estudio realizado en 2014 sobre la manera de caminar y el equilibrio de mujeres de la tercera edad.

4. EL CICLISMO MEJORA LA SALUD DE LAS ARTICULACIONES

Con la edad, millones de personas de todo el mundo tienen que hacer frente a dolencias en las articulaciones relacionadas con la actividad, que les provocan molestias y limitan su movilidad.

Afortunadamente, está demostrado que el ejercicio de bajo impacto como el ciclismo ayuda a gestionar e incluso a reducir los efectos de estos problemas en sus vidas.

En 2016, la revista Journal of Rheumatology publicó un estudio que demostró que un programa de ciclismo de tres meses de duración cosechaba mejoras significativas de las molestias, la rigidez, las limitaciones físicas y la calidad de vida de los participantes afectados por problemas de articulaciones.

Estos hallazgos se vieron corroborados por un metaanálisis realizado en 2020 y publicado en el Journal of Clinical Rehabilitation.

5. EL CICLISMO FORTALECE LAS PIERNAS

Al montar en bicicleta, las piernas tienen que vencer constantemente una cierta resistencia para poder avanzar.

Aunque se trata ante todo de un ejercicio cardiovascular, el esfuerzo requerido al pedalear ejercita también la resistencia.

Es un deporte combinado en el que participa la práctica totalidad de los músculos principales de la parte inferior del cuerpo, incluidos los glúteos, los cuádriceps, los tendones y las pantorrillas.

Si practica el ciclismo con regularidad, puede obtener uno de los beneficios más preciados inherentes a este deporte: el fortalecimiento de las piernas.

6. EL CICLISMO PUEDE REDUCIR EL ESTRÉS Y MEJORAR LA SALUD MENTAL

Cualquier ciclista veterano podrá confirmarle que los beneficios del ciclismo no se limitan al plano físico.

Es bien sabido que el ejercicio puede ayudar a reducir el estrés, levantar el estado de ánimo y mejorar la salud mental; en estos aspectos, el ciclismo no es una excepción.

Además, si mientras pedalea escucha su música favorita, un podcast, los sonidos de la naturaleza o simplemente deja volar sus pensamientos, verá cómo disminuye su tensión mental y sentirá una mayor paz interior.

Paralelamente, el hecho de circular al aire libre aporta valores añadidos como la exposición a la luz solar y el tiempo que pasa en el exterior.

7. EL CICLISMO ES BUENO PARA LA CIRCULACIÓN

El último elemento de nuestra lista de beneficios del ciclismo para la salud es uno de los más relevantes.

Como vimos en el primer punto, montar en bicicletea es, por naturaleza, un ejercicio cardiovascular que incrementa el riego sanguíneo hacia el corazón y su periferia.

Pero no se limita a eso: este mismo proceso impulsa la circulación en el cuerpo entero.

Sus manos, brazos, hombros, tórax y abdomen necesitan oxígeno y nutrientes para mantenerse sanos. No hace falta decir que las piernas no serían capaces de pedalear con eficacia si no estuvieran irrigadas con suficiente sangre.

El cuerpo, que es un verdadero prodigio biológico, aprende a adaptarse a estos cambios en el riego sanguíneo.

Los estudios de la fisiología humana realizados hasta la fecha llegaron a la fascinante conclusión de que practicar ejercicio regularmente induce determinadas adaptaciones del sistema circulatorio que pueden incrementar el caudal sanguíneo máximo.

Esta mejora se consigue porque el cuerpo responde a la nueva demanda de mayores volúmenes de sangre ampliando el diámetro y la densidad de las arterias en los tejidos esqueléticos y coronarios (cardiacos).

Y aquí no acaban los beneficios del ciclismo para la salud

Podríamos prolongar esta lista incesantemente, pero preferimos limitarnos a subrayar las propiedades que consideramos más beneficiosas para la salud física y mental.

Si estaba usted barajando la posibilidad de practicar el ciclismo, deje de pensárselo tanto: inspírese en este artículo y pase a la acción.

Saque el polvo de esa bici que tiene en el garaje, infle las ruedas y… ¡en marcha! También puede subirse a la bicicleta estática del gimnasio.

Sea cual sea su elección, hoy por hoy sabemos que este esfuerzo vale la pena.

Y si quiere mejorar sus resultados con la bici y fomentar su salud, capacidad de regeneración y desempeño, puede recurrir a la terapia BEMER.

Con solo dos sesiones diarias de ocho minutos cada una, BEMER estimula los músculos y puede mejorar los siguientes aspectos:

• Riego sanguíneo y circulación
• Aporte de oxígeno y evacuación de dióxido de carbono
• Condición física
• Desempeño y regeneración
• Fuerza y resistencia
• Energía y vitalidad
• Resiliencia
• Bienestar
• Reducción del estrés
• Descanso y relajación

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